domingo, 4 de abril de 2010

Tu sonrisa se hizo el pan con dulce de mis mañanas, todavía no sé nombrar este amor que me desarma. Te trajimos a un lugar absurdo, difícil y hermoso lleno de gente que salta a cabecear con los codos “hay que andar con pie de plomo” dicen las bisabuelas yo diría que vayas lento y parejo, pero que gastes tus suelas. Yo daría un brazo por vos; Vas a ver qué rico el mar, los besos, los amigos, van a dolerte a veces las muelas, mujeres y olvidos. Mirá bien a los dos lados antes de cruzar la vida y no te mastiques el viejo cuento de la otra mejilla. Y nunca le pongas a nadie la rodilla en la nuca, no te tomés en broma jamás a los hijos de puta. Vas a tener que hacer mucho con lo que haremos de vos. Bienvenido a este lío, hijo de mi alma, enano de mi corazón.