sábado, 11 de diciembre de 2010


Descubrí poquito a poco que el mundo no gira alrededor suyo, por lo que el mío  tampoco.  que en esos pocos momentos en que no pensaba en vos me iluminaba con una sonrisa tímida pero de felicidad al finAprendí a ahorrar las lágrimas y depresiones para los funerales, porque últimamente no me alcanza el tiempo como para pensar en el pasado y en quienes lo conforman. Me dí cuenta que no me rinde la falsedad de muchos, por lo que elijo dejarla de lado, sin molestarla. Y así concluye la historia de mi vida.